Con recorte o sin él, esta claro que nuestro sistema educativo tiene un problema. Como así lo ponen de manifiesto las comparaciones internacionales de resultados, como el informe PISA o las elevadas tasas de abandono escolar, que son de las mayores de Europa.
Se puede pensar que la causa sea la falta de recursos económicos pero en España el gasto por alumno es superior tanto a la media de la OCDE , como a la de países vecinos como Alemania , Francia o Italia.
Si el presupuesto empleado es superior a la media de nuestros vecinos y los resultados son peores, no creo que las medidas que el Gobierno ha tomado vayan en la dirección correcta.
En educación primaria y secundaria se va a incrementar el ratio de alumnos por clase en un 20%, pasando de 25 a 30 alumnos en primaria y llegando a 36 en la ESO, lo que va a empeorar la situación en las aulas, más aún cuando la figura del profesor no es respetada como antes.
Mientras en la educación universitaria se confirma una subida de las tasas entre un 15% y un 25%, cantidad que se va incrementando en los cursos repetidos hasta llegar incluso al 100% del coste de la enseñanza.Esta medida perjudica a las rentas mas bajas y va a afectar muy negativamente al futuro económico de nuestro país.
Parece que este Gobierno sólo busca el recorte a corto y medio plazo , pero hay que llevar a cabo reformas de calado para que nuestro sistema educativo sea más eficiente, reduciendo el gasto sin tener que recurrir al hacinamiento en las aulas, ni cargar sobre los estudiantes el sobrecoste de un sistema poco eficiente.
Así sólo estamos hipotecando el futuro de nuestro país.
Es que dentro de un sistema capitalista o no, es necesario responder a los costes de todo lo que empleamos.
ResponderEliminar¿Quién paga a los profesores? nosotros a través de los gestores.
Durante los felices años de socialismo-monárquico-capitalista hemos estado pagando a costa de pedir dinero prestado "a los mercados".
Curioso socialismo que vendió el futuro a cambio de unos votos que no llegaron y que esperaban por aquello de que ellos no subían los impuestos.
Se acabaron para siempre las vacas gordas y ahora se trata de lo de siempre, el que tiene puede y el que no tiene no puede, y me parece de una ceguera descomunal no ver que quienes nos dirigen han estudiado en EEUU y los que somos dirigidos hemos estudiado en esa "enseñanza pública de calidad" que yo no he visto jamás en Valencia.
La clave del éxito está en la reflexión, en la ecuanimidad y en saber diferenciar muy bien entre quimeras y trabajo sólido, trabajo estructurado, planificado y basado en un profundo estudio de los fines a conseguir, de que estos fines sean razonables y de la capacidad para conseguirlos.